dc.contributor.author | Pardo, José | |
dc.contributor.author | De-Miguel, A. | |
dc.contributor.author | Quinones, Ana | |
dc.contributor.author | Molina, María D. | |
dc.date.accessioned | 2020-12-11T08:49:59Z | |
dc.date.available | 2020-12-11T08:49:59Z | |
dc.date.issued | 2016 | es |
dc.identifier.citation | Pardo, J., de-Miguel, A., Quiñones, A. & Molina, M. D. (2016). Picado y oleocelosis por insolación en la variedad Safor. Levante Agrícola: Revista internacional de cítricos, (430), 23-30. | es |
dc.identifier.issn | 0457-6039 | |
dc.identifier.uri | http://hdl.handle.net/20.500.11939/6887 | |
dc.description.abstract | Cada vez es más frecuente encontrar
en los frutos cítricos daños causados
por fisiopatías relacionadas con la
radiación solar, sea porque esta es más
intensa a causa del cambio climático o
sea por el cultivo de nuevas variedades
que son más sensibles. Es el caso de la
mandarina Safor que muestra cierta
sensibilidad al picado y la oleocelosis
causados porla insolación.
El picado se manifiesta en forma de
pequeñas manchas de color oscuro, de
aspecto suberificado, sobre la corteza
del fruto en la cara más expuesta al sol
(Figura 1, pág. 24), la cual previamente
está afectada por planchado mostrando
una zona amarillenta por la degradación
de la clorofila y cierto aplanado del
fruto. Los primeros síntomas de picado
se observan a mediados de julio y el
número de frutos afectados aumenta
hasta finales de septiembre. Los mayores
daños se han observado en plantaciones
jóvenes.
La causa de la alteración es la rigidez
y falta de elasticidad de las células
de la epidermis afectadas por planchado,
con lo cual la acumulación de savia
en los tejidos subepidérmicos induce la
roturas de las glándulas de aceite y trasvasamiento
de líquido provocando la
aparición de una zona necrosada y
reseca (Agustí et al., 2004). No solo
afecta a la mandarina Safor, las variedades
más sensibles al planchado a
menudo presentan daños de picado por
insolación, es el caso de la Clemenrubí,
Clemensoon, Orogrós, Cultifort y Basol.
En otras ocasiones, sin que la corteza
del fruto este afectada por planchado,
la radiación solar induce la rotura de
glándulas de aceite y la liberación de
los aceites esenciales que son fitotóxicos,
provocando oleocelosis (Figura 2,
pág. 24). En este caso los primeros síntomas
se aprecian a finales de agosto
como una decoloración amarillo-verdosa
de forma irregular sobre fondo verde
oscuro de la corteza del fruto y donde la zona afectada esta ligeramente deprimida,
resaltando las glándulas de aceite.
A medida que se aproxima la época
de maduración las manchas se oscurecen,
depreciando el valor del fruto. Los
daños se presentan de igual forma en la
cara del fruto mas expuesta al sol.
La manera en que la radiación solar
es capaz de provocar estos daños parece
ser mediante la generación de radicales
libres que poseen gran capacidad
oxidativa y afectan entre otras a la
estructura lípido-proteica de las membranas
celulares de las glándulas de
aceite (Maia et al., 2004; Knight et al.,
2002). El tamaño de las manchas
depende de la cantidad de aceite esencial
vertido; en la mandarina Safor las
manchas no suelen sobrepasar el tamaño
de 7 milímetros de diámetro y la frecuencia
varia de una a cinco por fruto.
Esta fisiopatía es bien conocida en
los países donde se cultiva la mandarina
Encore que es extremadamente sensible
y las manchas de oleocelosis suelen
ser de mayor tamaño. Denominan la afección como “peel pitting”, “green rind
spots” o “kohansho” en Japón (Medeira
et al., 1999; Chikaizumi 2000; Vitor et al.,
2001).
Varios son los trabajos que han
estudiado los posibles tratamientos a fin
de reducir los daños por la radiación
solar centrándose bien en el cultivo bajo
malla, lo que supone un sobrecoste
excesivo para el cultivo de cítricos, o
bien mediante la utilización de protectores
que reflejan parte de la radiación
solar y diminuyen la temperatura de la
planta como es el caso del silicato de
aluminio (caolín) o el carbonato cálcico
(Tsai et al., 2013; Chabbal et al., 2014).
Con el fin de conocer en mayor profundidad
estas dos fisiopatías y la respuesta
de la variedad Safor ante diferentes
tratamientos se diseñaron dos ensayos
en los que además de los protectores
mencionados se incorporaron para su
estudio correctores foliares de calcio y
silicio a fin de fortalecer la corteza y
mejorar la respuesta del fruto. | es |
dc.language.iso | es | es |
dc.publisher | Ediciones y promociones LAV | es |
dc.rights | Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 España | * |
dc.rights.uri | http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/3.0/es/ | * |
dc.subject | Oleocelosis | es |
dc.subject | Insolación | es |
dc.subject | Variedad Safor | es |
dc.title | Picado y oleocelosis por insolación en la variedad Safor | es |
dc.type | contributionToPeriodical | es |
dc.authorAddress | Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA), Carretera CV-315, Km. 10’7, 46113 Moncada (Valencia), España | es |
dc.entidadIVIA | Centro de Citricultura y Producción Vegetal | |
dc.entidadIVIA | Centro para el Desarrollo de la Agricultura Sostenible | |
dc.identifier.url | https://www.edicioneslav.es/producto/num-430-1er-trimestre-2016/ | es |
dc.journal.issueNumber | 430 | es |
dc.journal.title | Levante Agrícola | es |
dc.page.final | 30 | es |
dc.page.initial | 23 | es |
dc.rights.accessRights | openAccess | es |
dc.source.type | electronico | es |
dc.subject.agris | H20 Plant diseases | es |